22 de diciembre de 2016

MIS LIBROS FAVORITOS DEL 2016


Por: Octavio Díaz García de León

    Se ha vuelto costumbre hablar de los mejores libros del año en estas fechas y eso es bueno para dejarles descansar de los temas que nos agobian, por lo que me permito comentarles en esta ocasión acerca de los libros que más me gustaron este año. Destaco los siguientes libros: 

1.    Sapiens. De animales a dioses” y “Homo Deus”. Autor: Yuval Noah Harari. El primero de los libros trata de la macro historia de la humanidad. El autor explora los mecanismos por los que alcanzamos éxito como especie y el impacto que hemos tenido en el medio ambiente. Recorre nuestra evolución desde la adquisición del lenguaje, el descubrimiento de la agricultura, la unificación de la humanidad hasta la revolución científica. Describe como pasamos de tener sociedades pequeñas a formar una sociedad global gracias a mitos y ficciones que permitieron que los humanos cooperaran entre sí. Tres órdenes universales ayudaron a aglutinar a los humanos: el orden monetario, el orden imperial y el orden religioso. Con la revolución científica que inició hace 500 años, el poder humano ha crecido de manera exponencial. Al final del libro considera el autor que el Homo Sapiens está en vía de extinción para dar paso al Homo Deus. En el segundo libro, Harari menciona que vivimos inmersos en historias o relatos que nos inventamos para darle sentido a la vida de tal forma que algunas de las nuevas religiones y mitos que ha construido la sociedad moderna son el humanismo, el liberalismo y el individualismo. Sin embargo, estas nuevas creencias están siendo socavadas por la ciencia, como antes fueron socavadas las religiones. Hacia el futuro, prevé que podría haber dos vertientes de desarrollo de la humanidad: una en donde prevalecerán los seres humanos convertidos en inmortales; ciberseres con mejoras técnicas a sus cuerpos y capacidad intelectual aumentada. Esto ocurrirá porque la ciencia permite ver a los cuerpos biológicos y sus problemas como desafíos técnicos que pueden ser solucionados. Así, la muerte dejará de ser inevitable porque solo es un problema técnico por resolver. La otra gran tendencia es el dataísmo que explica al universo como un flujo de datos y el valor de cualquier fenómeno o entidad está dado por su contribución al procesamiento de datos. Por ello, los organismos no son más que algoritmos que procesan datos. Existe el riesgo de que la inteligencia se desconecte de la conciencia y entonces algoritmos mucho más inteligentes que los seres humanos los podrían reemplazar. Entonces las máquinas inteligentes podrían sustituir a los humanos.

2.    “Estrategia: Una Historia”. Autor: Lawrence Freedman. Este libro enciclopédico, recorre la historia de la estrategia a través de los siglos. El autor considera que solo existen tres elementos clave para todas las estrategias: engaño, formación de coaliciones y uso de la violencia. El libro  nos lleva por  la estrategia en la Biblia, en los griegos, en los chinos y durante la edad media; luego trata de la estrategia aplicada a los temas militares  desde Clausewitz,  hasta los juegos nucleares, la guerra de guerrillas y la guerra actual usando las nuevas tecnologías; la siguiente sección habla de las estrategias de los  menos privilegiados, como las teorías marxistas que proponen estrategias a los trabajadores, las religiones que defienden al débil y los sistemas democráticos que empoderan a las masas; luego trata de la estrategia desde el punto de vista de las élites, por ejemplo, las gerenciales que dirigen empresas; finaliza exponiendo tres teorías modernas de la estrategia: aquella basada en historias y guiones, aquella que considera que  las decisiones son siempre racionales y la que considera  que las personas no siempre actúan racionalmente.

3.    “Eso no puede pasar aquí”. Autor: Sinclair Lewis. Esta novela se convierte en lectura obligada ahora que ha ganado Trump las elecciones en Estados Unidos. Situada la acción a principios de los años treinta en ese país, describe lo que pasaría de ganar las elecciones un demagogo populista que llega al poder para crear una sociedad totalitaria del tipo que en aquella época habían creado en Europa, Stalin, Hitler, Mussolini y Franco. El autor escribió esta novela en los años treinta como advertencia a los Estados Unidos de lo que podía pasar si un régimen como los mencionados llegara a implantarse allí. Ahora el riesgo está de vuelta.

4.    “El adversario”. Autor: Emmanuel Carrere. La historia real de un hombre que fingió tener una vida que nunca tuvo y para lo cual tuvo que mentir constantemente a su familia y a todo mundo quienes no sospechan nada y lo creen un hombre exitoso. Pero una vez que está a punto de revelarse la verdad, mata a su familia. ¿Cómo fue posible que engañara a tantos tan profundamente y por tanto tiempo? La historia está relatada magistralmente por Carrere.

    Hay otros libros que recomiendo pero que no puedo reseñar por falta de espacio. Entre ellos los del filósofo alemán Rudiger Safranski: “Romanticismo: Una odisea del espíritu alemán”, “El mal o el drama de la Libertad” y “Goethe: la vida como obra de arte”.


     Espero que el año nuevo les traiga nuevos y provechosos libros. Que pasen una feliz navidad y tengan un año 2017 en que se cumplan todas sus metas con salud y serenidad. ________________________________________________________________

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17 de diciembre de 2016

ARISTÓCRATA DE LA CULTURA


Por: Octavio Díaz García de León

Con un abrazo, para Fernando Tovar y de Teresa

       El pasado sábado 10 de diciembre falleció el primer Secretario de Cultura que ha tenido nuestro país, Rafael Tovar y de Teresa, después de una enfermedad que se manifestó al poco tiempo de que asumió el cargo hace apenas un año. Le tocó presidir la transición para que el CONACULTA dejara de ser parte de la Secretaría de Educación Pública y darle rango de secretaría. Este fue un reconocimiento por parte del presidente Peña Nieto en dos sentidos: por una parte, reconocer el que la promoción cultural en nuestro país merecía su atención directa formando parte de su gabinete y por otra parte reconocer la trayectoria de un funcionario público que dedicó la mayor parte de su vida a la promoción de la cultura.
     Rafael Tovar inició su camino en el servicio público a los 20 años de edad en donde permaneció, salvo por un lapso de 4 años, hasta su muerte. En su trayectoria de diplomático y funcionario público siempre estuvo ligado al tema de la promoción cultural. Sus puestos más destacados fueron como presidente del CONACULTA en tres ocasiones: en los sexenios de los presidentes Salinas de Gortari, Zedillo y Peña, para terminar su carrera como Secretario de Cultura. También fue embajador de México en Italia en el sexenio del presidente Fox y presidente de la comisión organizadora de los festejos del bicentenario con el presidente Calderón.
      En su carrera como funcionario público creo instituciones y programas que definen su legado. Formó el  Sistema Nacional de Creadores de Arte  que reconoce a los creadores y estimula la creación artística; construyó el Centro Nacional de las Artes; el Centro de la Imagen, para la divulgación de la fotografía; el Canal 22 de televisión; el Fondo para la Producción Cinematográfica de Calidad;  el Fondo de Inversión y Estímulo al Cine;  integró la Cineteca Nacional al sector cultural, misma que se renovó; formó la Videoteca Universal;  fundó el Sistema Nacional de Fomento Musical, para la formación de orquestas;  constituyó  el Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados;  creó el Museo de Arte Popular y el Programa Nacional de Desarrollo Cultural Infantil "Alas y Raíces a los Niños", entre otros.

     Destacaban sus cualidades como pianista, melómano, escritor e historiador. Si bien quizá su vocación se inclinaba más por ser un creador artístico, lo que prevaleció en su actividad profesional fue dedicarse al servicio público para promover la cultura. Fue también una forma de manifestar su creatividad a través de la fundación de instituciones y programas para el fomento de las artes. En las reseñas con motivo de su muerte, sus amigos resaltan su gran conocimiento sobre la literatura pianística y su amplia colección de discos, videos y libros (Que ojalá se conserve y no se disperse). En su formación y la de su hermano Guillermo influyeron su padre y su abuelo materno, poseedor ambos de una amplísima cultura y el abuelo dueño de una gran biblioteca en su casona de las calles de Jalapa en la ciudad de México. Hay que recordar que su hermano Guillermo destacó desde niño como una de las personas más conocedoras del arte Novohispano, por lo cual también obtuvo numerosos reconocimientos.

     Quienes trataron a Rafael Tovar dieron testimonio de su prudencia, amabilidad, porte distinguido, elegancia en el vestir, modales refinados y educación exquisita, como salido de la época que evoca con nostalgia en sus libros, impregnados de los recuerdos de su familia materna: el Porfiriato.  Solo en una ocasión tuve oportunidad de saludarle personalmente: cuando el Lic. Tovar era embajador en Italia, me lo encontré en el Panteón, en Roma, donde se encontraba mostrándole el espectacular templo a su hijo. Me saludó con amabilidad a pesar de que yo era un perfecto desconocido y habiéndole abordado un tanto intempestivamente.   

    Otro aspecto relevante de su biografía fue el haberse casado en primeras nupcias con Carmen López Portillo Romano, cuando el padre de ella era presidente de la república, acontecimiento que quedó marcado como uno de los acontecimientos sociales más destacados de su época.  El asunto es relevante no por haberse convertido en yerno del presidente sino porque López Portillo y su familia, también fueron grandes impulsores de la cultura. Hay que recordar que el presidente escribió una novela y tenía intereses literarios. Le tocó crear la Universidad del Claustro de Sor Juana honrando a la admirable poetisa novohispana de la que la familia López Portillo fue gran admiradora.  La maestra Carmen López Portillo dirige esa institución desde 1990.

     Queda un gran hueco muy difícil de llenar en la promoción de la cultura desde el gobierno. Queda también la discusión de hasta qué punto debe intervenir el gobierno en esta tarea. Pero ante la falta de interés de los medios de comunicación por promover todo aquello que no sea negocio y salvo algunas iniciativas privadas interesantes como el museo Soumaya, es necesario que el gobierno promueva la cultura intensamente ante el deterioro educativo de nuestro país. Que lo hagan intelectuales como Vasconcelos y Tovar, inmersos como estaban ellos en una amplísima cultura, sería todavía mejor. Ojalá el presidente Peña encuentre pronto un reemplazo digno para la Secretaría de la Cultura.
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9 de diciembre de 2016

ES LA ECONOMÍA…


Por: Octavio Díaz García de León


     Nuestro país enfrenta muchos problemas y valdría la pena intentar encontrar la causa raíz de los mismos. Me permito aventurar que existen por lo menos dos causas de las que se derivan la mayor parte de los problemas del país: el mal desempeño de la economía que no permite ofrecer niveles mínimos de bienestar a la mayoría de la población y la falta de instituciones fuertes que permitan el buen funcionamiento del país.

 En la encuesta de GEA-ISA de noviembre (http://www.isa.org.mx/contenido/GIMX1611p.pdf), los encuestados manifestaron que los principales problemas del país son, en ese orden, el económico, la inseguridad, el político y los servicios públicos. Estos se podrían subdividir a su vez en falta de empleo, bajos ingresos, empleo informal, asesinatos, robos, extorsiones, secuestros, corrupción, desconfianza hacia los políticos y sus partidos, malos servicios educativos, de salud, urbanos, etc.

     Por una parte, podemos advertir que hacen falta instituciones sólidas que le den rumbo y certeza a la conducción del país. En muchos aspectos apenas estamos construyendo instituciones y en otros, las existentes están afectadas por la corrupción, la ineficacia, la ineficiencia y por atender intereses particulares o clientelares. Esto se puede apreciar, por ejemplo, en la corrupción de los ex gobernadores de Veracruz, Sonora, Chihuahua, Zacatecas, Quintana Roo y un largo etcétera, o la incapacidad para gobernar a Guerrero, Oaxaca, Michoacán y Tamaulipas entre otros.

     Por otra parte, el que no tengamos una economía que ofrezca niveles mínimos de subsistencia u oportunidades para mejorar la calidad de vida y bienestar, ocasiona que las personas intenten conseguirlo recurriendo al empleo informal, la migración hacia Estados Unidos o incorporándose a la delincuencia. 

     Mientras que en otros países se han alcanzado niveles de ingreso y bienestar elevados de una manera relativamente rápida, como fue el caso de Japón, Singapur, Taiwán, Corea del Sur y más recientemente China, en México seguimos sin poder construir una economía que saque de la pobreza a la gran mayoría de la población y allí es donde debemos enfocar nuestros esfuerzos.

    Ya lo decía Bill Clinton en su campaña para la presidencia de su país en los años noventa: “Es la economía, estúpido”. A su esposa se le olvidó esto en las pasadas elecciones, mientras que Trump sí lo captó y en lugar de proponer soluciones razonadas (difíciles de entender por su electorado) de cómo resolver el problema económico apeló a los sentimientos echándole la culpa de sus males a chinos y mexicanos quienes, según él, les robaban sus trabajos. En realidad, la manufactura en el mundo desarrollado está evolucionando para sustituir a los seres humanos con robots y el 85% de la pérdida de empleos en Estados Unidos se debe a razones tecnológicas y no a que la manufactura se haya trasladado a otros países (http://theintellectualist.co/analysis-between-2000-and-2010-85-of-manufacturing-jobs-were-lost-to-technology-not-globalization/

    La economía en México no ha funcionado, por lo menos en las últimas 5 décadas y si me apuran un poco, desde que somos nación independiente, quizá con la excepción del “Porfiriato” y durante el “Desarrollo estabilizador”.  Basta ver algunas cifras: el 57.4% % de la población ocupada (29.1 millones de personas) (http://expansion.mx/economia/2016/05/13/mas-de-29-millones-de-mexicanos-trabajan-en-la-economia-informal) tienen trabajos informales y más de 16 millones de mexicanos emigraron hacia Estados Unidos entre 1965 y 2015 (http://www.pewhispanic.org/2015/09/28/modern-immigration-wave-brings-59-million-to-u-s-driving-population-growth-and-change-through-2065/).

    El que no funcione la economía ha servido también para alimentar a la delincuencia. Detrás de los altos índices de inseguridad está la falta de empleo y de oportunidades económicas satisfactorias. Hace unos años el Secretario de la Defensa estimaba en alrededor de medio millón de personas dedicada a la delincuencia organizada. A esta cifra habrá que agregar a quienes ya están en la cárcel (Alrededor de 238,000) y a otros delincuentes menores con lo que el número de personas dedicadas a actividades ilegales puede sobrepasar un millón (Casi equivalente a la población del estado de Aguascalientes).     

    Uno de los aspectos que ha impedido el desarrollo económico en México es el modelo manufacturero basado en maquiladoras. Este se inició en los años sesenta en México al mismo tiempo que en Japón, Corea y Taiwán entre otros. Pero mientras que los países del sureste asiático evolucionaron de ser países maquiladores a manufacturar productos con marcas y tecnología propia que las ha colocado entre las economías más desarrolladas del mundo, México se quedó estancado en este modelo e incluso se acentuó con el Tratado de Libre Comercio para América del Norte.

    Si bien en el corto plazo Trump puede ser una amenaza a la economía mexicana al tratar de llevarse estos trabajos repetitivos y de bajo valor agregado a su país, en el largo plazo la amenaza vendrá de la revolución tecnológica y se perderán de todas formas estos empleos de bajo valor agregado. Las maquiladoras no tardarán en desaparecer.

    Urge buscar un modelo de desarrollo económico de largo plazo que nos permitan generar empleos de mayor valor agregado, que paguen más y permitan competir mejor en el mundo. La solución no la debe dar solo el gobierno ya que es la iniciativa privada quien crea empresas para generar riqueza, empleo y pagar impuestos. Es muy importante que los empresarios tomen el liderazgo para crear nuevos modelos de negocios. El gobierno deberá proporcionar las instituciones sólidas que generen condiciones de estabilidad y seguridad y tener un papel meramente subsidiario que no estorbe a la iniciativa privada. El peligro para México no solo es Trump, sino nuestra incapacidad para crear una economía moderna.

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